UA-40840920-1

sexta-feira, 13 de dezembro de 2013

Vainilla

Por Carol Vannier

Por mucho tempo viví sin saber que existía vainilla sin ser aquel frasco de esencia que se compra en el mercado, ni imaginada de donde venía tal aroma. Continúo sin ser una gran conocedora, pero desde que la probé por primera vez, ¡aprendía a valorizar bastante la vaina de la orquídea!


Incluso después de esa pequeña revelación, no tengo nada en contra de la esencia industrializada, pero no hay como negar la superioridad de la vainilla verdadera. Sólo que esta calidad tiene su precio y no es muy barato, debido a la dificultad del cultivo de la orquídea. Por eso guardo mis vainas para recetas bien escogidas, o servidas en una ocasión especial, o en recetas donde ella va a brillar sin ser tapada por otros sabores más fuertes. Y mismo así, después de raspar bien la vaina, pongo la cáscara en el azucarero para,  con el tiempo, tener un azúcar con sabor levemente a vainilla.

Pero recientemente desenvolví una solución a medio plazo entre sacar la preciosa vaina del armario y usar la esencia industrializada: una esencia casera. Vi en algunos blogs que las personas hacían su propia esencia, simplemente abriendo la vaina para exponer las semillas, y metiéndolas en un vidrio con alguna bebida fuerte, como vodka, ron o whisky. El vidrio tiene que ser guardado y agitado de ven en cuando, y en más o menos 2 meses el líquido estará oscuro, listo para usar. Si se hace con un ron oscuro o whisky no sé si será difícil apreciar la transición. En mi caso usé vodka, era bien claro, literalmente. :)

Puede ir completando el vidrio a medida que se vacía, y sacudiéndolo siempre (más o menos dos veces por mes, pero sin neura) para soltar y disolver las semillas. Llegará un momento en el que se quede flojo… y ahí es cuando tuve una buena idea: después de usar una vaina en una receta, en lugar de ponerla en el azucarero, la puse en el vidrio, y allí las semillas que insisten en estar pegadas, son bien aprovechadas. Pensé en una mejor salida que el azúcar, que tiene un aroma demasiado suave. ¡Ya en el vidrio de esencia que estaba medio vacío dio un rejuvenecimiento! :)

Para quien quiera comenzar con su esencia en casa, puede hacerlo con una vaina entera, o media, dependiendo del tamaño del vidrio, y después ir añadiendo esas vainas usadas. Yo utilizo botellitas de bebida en miniatura, que son bien pequeñas, por lo que media vaina ya sirve para comenzar. Cuando fui a reformar una de ellas, usé un líquido que ya estaba claro, de una más antigua, ¡para no desperdiciar nada!

Al final de cuenta, se trata de un proyecto que tarda un poco para dar fruto, pero da casi nada de trabajo, y ¡el producto final es óptimo!
  

                                            El reformado y el que ya finalizó sus servicios. :)

trad. - Mayte Rodríguez Moro

Sem comentários:

Enviar um comentário

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...